Es la historia de una chica "limpia, de buena presencia y alfabetizada" (como exigen en el anuncio) que deja a su madre en el sur y entra a trabajar de interna en una casa acomodada en Santiago de Chile.
Lo que iba a ser algo provisional y transitorio, se convierte en 7 años de trabajo esclavo. Así lo vive Estela y así lo percibimos nosotros a través de su narración:
Esas 8 horas de trabajo de los "señores" frente a las 24 de la empleada de hogar.
Ese chalet con piscina frente al zulo anejo a la cocina donde duerme la criada.
Ese limpiar la ropa sucia de los demás, los cuartos de baño, ponerles el plato delante de su sitio en la mesa...
Los tiempos han cambiado, pero existen muchas clases de esclavitud.
La historia está contada como un monólogo en el que Estela interpela repetidamente a sus interlocutores, no sabemos si es a los lectores, o a un jurado que juzga la muerte de la hija de la casa, hecho con el que empieza la historia.
El caso es que gota a gota, como en una tragedia griega, asistimos a la eclosión del drama. Todo nos acerca al desenlace fatídico: la perra callejera, la invasión de ratas en el ático, el inquietante carácter de la niña, las inconvenientes confesiones del jefe de familia, el errático comportamiento de la madre...
Y la imposibilidad de Estela de soportar todo eso por más tiempo.
Todo se alía para que asistamos a un final, no por anunciado menos trágico.
Después de "Ceniza en la boca" de Brenda Navarro, me ha vuelto a sacudir esta novela sobre servidumbres. Da igual que sea una inmigrante, como es el caso de la novela de Navarro, o una oriunda, como es este. Hay que ponerse en la piel del sirviente para comprender lo injusto de canjear todo tu tiempo por poco dinero, esos flecos de desprecio por los de abajo, por los que te friegan el water, por los que literalmente borran tus huellas de porquería de este mundo.
Es una novela negra, ácida, muy dura, de las que no puedes dejar de recordar porque te hacen replantearte cosas, cosas que te tocan más de cerca de lo que pensabas; las servidumbres de las que has gozado alguna vez, por ejemplo.
"Libros-sacudida" los llamo yo a falta de mejor nombre.
¿Algún libro que les haya "sacudido" y quieran compartir conmigo?
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