domingo, 5 de febrero de 2017

Libros

2 comentarios:

RobertoC dijo...

Pues sí que es un claro ejemplo de una belleza inesperada. Cariños mi muy estimada amiga.

Blogmaníacos dijo...

Los mismos de vuelta, mi querido amigo.

Como vemos, la belleza de un libro no siempre está en el interior :-)